Todo individuo tiene derecho a disfrutar de una buena playa y divertirse en ella, sin importar su condición física.
Sin embargo, hay muchas playas que no cuentan con los sistemas de accesibilidad adecuados para personas con movilidad reducida (PMR), y esto puede ser un gran obstáculo para que estas personas puedan sentirse cómodas y seguras mientras visitan una de estas playas.
Por esta razón, el CERMI (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad) se ha encargado de crear un programa de accesibilidad a las playas, que ha servido para que las autoridades adapten y doten algunas playas de España con todo el equipo necesario para que las personas con discapacidad o movilidad reducida puedan acceder a estos lugares sin ningún problema.
Si te interesa conocer más sobre este tema, ya sea porque tienes alguna discapacidad o tienes un familiar con una dificultad física, te invitamos a echar un vistazo a la información que te damos a continuación, y que desde Ortopedia Online Tarancón estamos encantados de compartir a través de nuestros datos de contacto.
INSTALACIONES NECESARIAS EN PLAYAS ESPAÑOLAS
Para empezar, las playas deben contar con estacionamiento para que las personas con movilidad reducida puedan llegar directamente a éstas. Para las playas urbanas es necesario ofrecer servicio de transporte para quienes no puedan caminar fácilmente hacia ellas.
Igualmente, es fundamental que todas las playas cuenten con pasarelas de madera y rampas antideslizantes para que las personas se puedan mover con total libertad. Así mismo, las pasarelas y rampas no pueden tener resaltes, escalones aislados o desniveles que obstruyan la movilidad.
Aparte de esto, la longitud de las rampas debe ser menor o igual a 3 metros y el ancho debe ser de 1,20 metros. Del mismo modo, estas deben tener un rellano intermedio de 1,50m x 1,50m y también deben tener pasamanos a ambos lados.
Por otro lado, es necesario que las pasarelas estén conectadas con los restaurantes, baños, duchas, lavapiés y vestuarios para que las personas con movilidad reducida puedan acceder fácilmente a estos servicios.
Para los baños es indispensable que el suelo sea antideslizante, y que haya apoyos en las paredes que les permitan a las personas apoyarse. Además de esto, es necesario que las duchas tengan banquetas, asas y rociadores de altura graduable.
Finalmente, es muy importante que cada playa tenga paneles de señalización que ayuden a las personas a ubicarse, y al mismo tiempo, a conocer todos los servicios que se ofrecen en el lugar.
PERSONAL DE APOYO EN LAS PLAYAS ESPAÑOLAS
Todas las playas deben contar con un equipo de rescatistas y personal de apoyo que tengan todas las herramientas y sobre todo que tengan los conocimientos necesarios para atender a las personas con discapacidad.
Además de atender a las personas con movilidad reducida, el personal de apoyo debe darle a estos individuos todas las recomendaciones necesarias para que su experiencia al visitar la playa sea lo más cómoda y agradable posible. De este modo, las personas que presenten alguna dificultad física se sentirán más seguras en el lugar y sabrán perfectamente lo que necesitan evitar, y lo que pueden hacer sin ningún problema.
Para terminar, tanto los socorristas como el personal de apoyo deben estar distribuidos alrededor de la playa para vigilar que las personas con discapacidad están siguiendo todas las recomendaciones y que se mantienen seguras.
AYUDAS TECNICAS EN LAS PLAYAS ESPAÑOLAS
En primer lugar, el personal de apoyo también necesita ofrecer a las personas con movilidad reducida los recursos necesarios para que se desplacen por todo el lugar. Algunos de los elementos que se deben tener en las playas son sillas de ruedas, grúas, chalecos, y aros flotadores.
En segundo lugar, el personal encargado de vigilar la playa tiene como función acompañar a estas personas en caso de que necesiten utilizar algún servicio del lugar, y no puedan llegar por sus propios medios o no tengan a nadie que los ayude.
En tercer lugar, es muy importante colocar líneas de boyas que queden perpendiculares a la playa para que todas las personas identifiquen hasta qué punto pueden desplazarse en el agua, sin correr ningún riesgo.
Del mismo modo, es fundamental que todos los baños de las playas cuenten con dispositivos acústicos para guiar a las personas que presenten discapacidad visual y, de esta manera, evitar todo tipo de accidentes.
La gestión de unas buenas playas adaptadas para personas con movilidad reducida, es un punto a favor de estos lugares por toda la costa española, de forma que los usuarios podrán elegir la playa que más les convengan sin dejar de disfrutar.
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