Hay ocasiones en las que los niños y niñas requieren tratamientos ortopédicos para las caderas. En esas situaciones, lo mejor es contar con tratamientos médicos y asesoría de fisioterapeutas que serán los que indiquen los pasos a seguir para la recuperación de los pequeños.
En este artículo esbozaremos algunas de las afecciones más frecuentes que pueden presentarse en niños y niñas, y que podrían requerir de soluciones ortopédicas para su mejoría y recuperación.
La Displasia Congénita de Cadera es también llamada Displasia del desarrollo de la cadera. Tal como su nombre lo indica, es una alteración que ocurre en la articulación de la cadera. Su presencia es debida a una malformación que provoca que la cabeza del fémur no encaje bien en la cadera. Esto a su vez ocasiona una pérdida de la relación entre las superficies articulares.
En estos caso, la displasia de cadera puede llegar a provocar dolor y cojera en la marcha.
Sin embargo, esta no es una patología muy frecuente. Se estima que la sufren uno de cada mil niños, presentándose con más frecuencia en niñas. Los estudios indican que entre las causas de esta patología se encuentran factores hereditarios, intrauterinos, ambientales y hormonales.
Entre los síntomas de la displasia de cadera se encuentra la disparidad en la longitud de las piernas, espacio entre las piernas con mayor anchura de lo normal. En niños que ya caminan puede presentarse una cojera o una curvatura anormal de la columna vertebral.
Una vez diagnosticada la patología, uno de los posibles tratamientos es el uso del arnés de Pavlik. Este dispositivo puede llegar a usarse para evitar una intervención quirúrgica. Se puede utilizar en bebés de hasta seis meses de edad. Su uso suele limitarse hasta un par de meses y tiene una gran efectividad, aunque en ciertas ocasiones debe recurrirse a otros tratamientos.
El arnés de Pavlik es un aparato ortopédico diseñado para mantener la posición de las piernas del bebé en la posición correcta. Está compuesto por tiras y cinchas cruzadas.
Se utiliza en displasia de cadera pero también en otras patologías que impidan el desarrollo y la estabilización de la cadera. En ocasiones es usado también para complementar otros tratamientos.
Su uso debe ser recomendado por el ortopedista, que es el profesional que determinará si debe usarse y por cuánto tiempo.
La sinovitis transitoria de cadera es una inflamación del tejido sinovial de la cadera que suele curarse sola en el transcurso de unos pocos días. Puede ocurrir entre los nueve meses de edad y la adolescencia, aunque la mayoría de los casos se registran en niños y niñas entre tres y ocho años. Suele ser un proceso benigno y leve que se trata con reposo y antiinflamatorios. Sin embargo, pueden existir ocasiones en las que se hace necesario un tratamiento más fuerte.
Puede requerirse el ingreso al hospital para colocar una tracción cutánea en las extremidades con el objetivo de aliviar el dolor del pequeño.
En cualquier caso, siempre habrá que recurrir a la consulta del profesional de la medicina ante cualquier dolor que se presente en niños y niñas.
Los niños y niñas deben ser revisados periódicamente por los profesionales de la salud. Ellos pueden detectar y diagnosticar diferentes patologías desde edades muy tempranas y recomendar los tratamientos adecuados, así como indicar la realización de terapias y otras medidas.
Es decir, el médico puede indicar si algo está mal en el desarrollo de niños y bebés.
En el caso de las caderas, pueden realizar ciertas pruebas diagnósticas para determinar si el desarrollo está siendo el adecuado. En ocasiones pueden solicitar la realización de exámenes radiológicos y ecográficos.
A pesar de todos los cuidados que los padres puedan tener con sus pequeños, pueden ocurrir lesiones o presentarse patologías por causas desconocidas.
Recuerde siempre la importancia de proteger a los bebés y cuando compre productos como asientos, portabebés y hamacas, revise que estos protejan siempre al pequeño y contengan las normas adecuadas de seguridad. También asegúrese de seguir las indicaciones de seguridad para su uso.
Otra cosa que puede tomar en consideración es que en caso que su pequeño presente algún problema en sus caderas, la gran mayoría suelen resolverse con aparatos ortopédicos. Sólo uno de cada veinte bebés requerirá cirugía para solucionar problemas en sus caderas.
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